4.8 Los efectos visuales
En la televisión contemporánea los efectos visuales están extraordinariamente
presentes tanto para crear efectos especiales como para retocar los
colores, insertar diversas bandas de publicidad, crear transiciones o insertar
el indicativo de la cadena.
El mezclador
de vídeo constituye la herramienta básica desde donde se generan y organizan
la mayoría de los efectos visuales analógicos. El mezclador recibe las distintas fuentes de entrada
de imágenes y tras su paso por una matriz de conmutación permite elegir
la factura visual de las imágenes acabadas. Su primera función consiste
en establecer las maneras en que
se producen las transiciones entre planos. De este modo, todo mezclador
de video realiza cuanto menos tres tipos de transición:
-
Por corte o cambio instantáneo de una
imagen a otra. Es la más frecuente en todos los programas
-
Por fundido. A veces yendo la imagen
desde negro y ganando luminosidad hasta su nivel normal, conocidos
como fade in; y a veces desvaneciéndose la imagen
original hacia negro, conocidos como fade
out.
-
Por encadenado. Consistente en la
superposición de la imagen previa a la segunda de una manera que aquella
se va desvaneciendo.
Más sofisticadas son las transiciones que utilizan
cortinillas. Las cortinillas
poseen
unos rebordes visibles, de formas geométricas y con variadas direcciones
de movimiento - arriba, abajo, derecha, izquierda, espiral- dando paso
de una imagen a otra
por sustitución.
Eran muy utilizadas en el cine mudo y en la actualidad se usan en series
nostálgicas o para llamar la atención visual.
Hoy día es muy frecuente en muchos programas que la imagen incorpore
algún tipo de texto. Éstos se hacen con la
tituladora, un aparato capaz de insertar textos y subtítulos en la
imagen. Es con lo que se insertan, por ejemplo, los mensajes SMS en muchos programas actuales.
El
chroma key es el efecto especial más conocido popularmente. Su
fundamento consiste en insertar una imagen con un fondo distinto proveniente
de otro lugar. Se establece un color (chroma) como 'llave' (key) que da
entrada a la imagen -habitualmente el azul o el verde-, el mezclador detecta
este color y las zonas donde existe las rellena con otra señal de vídeo
seleccionada. Es decir, si tenemos un fondo de un paisaje lunar y por
otro lado grabamos a un actor disfrazado de astronauta sobre un fondo
verde, al mezclar ambas imágenes ejecutando la función de chroma del mezclador
obtendremos una tercera imagen del astronauta sobre la luna; el color
verde del plano del astronauta habrá sido sustituido por la imagen de
la luna. El elemento a incrustar no debe jamás llevar nada del color 'llave',
dado que aparecería como un agujero a través del cual veríamos el fondo.
También existen, claro está, los
efectos digitales; la mayoría de estos efectos no están incluidos
en el mezclador sino que son unidades independientes. Son innumerables
y el desarrollo de las diversas compañías de
software
hace surgir cada vez nuevas opciones, aunque en ocasiones los problemas
de competencia dan lugar a incompatibilidades u obligan a la adquisición
de
hardware extra para su uso. Algunos ejemplos
son:
efecto de compresión, varía la relación de aspecto de la imagen;
pushes, cuando una imagen empuja a otra para sacarla de cuadro;
flips,
efectos de giro sobre los ejes de la imagen salvo la perpendicular;
rotación,
similar al flip añadiendo el giro sobre la perpendicular.