Cine
 
Historia TV en España
Economía, Sociedad y TV
Tecnología
El lenguaje de la TV
La programación

 

 

Inicio > Televisión > 9 Deportes > 9.7 La Superbowl. El espectáculo televisivo

9.7 La Superbowl. El espectáculo televisivo
La Superbowl es la final del campeonato de fútbol americano y se celebra a partido único, algo inusual entre los deportes norteamericanos. Esta singularidad provoca que el duelo la convierta en el principal fenómeno televisivo de Estados Unidos y que con una audiencia de 800 millones de personas repartidos en centenares de países la conviertan en el evento deportivo más visto en el mundo después de las Copas mundiales de fútbol.

Lo cierto es que la Superbowl no es sólo deporte: es un espectáculo concebido para su emisión televisiva que combina deporte con música (en el descanso siempre se incluyen actuaciones musicales de las figuras más relevantes del pop y el rock, como Mariah Carey, U2 o Paul McCartney).

Igual de cierto es que el fútbol americano constituye el deporte televisivo por excelencia; de hecho las reglas del juego empezaron a cambiarse en función de su dimensión televisiva a principios de los años ‘70 y no se limitaron a variar la división de los tiempos, sino que estas novedades afectaron a temas tan intrínsecamente deportivos como las dimensiones del campo y al tipo de penalizaciones.

Las cifras que se manejan en la superbowl son estratosféricas, inclusive para Europa. La NFL (National Football League) asociación organizadora del evento vende los derechos de retrasmisión por cuatro años por un monto total que resulta equivalente, por ejemplo, a la deuda externa de México con Estados Unidos, más de 4.000 millones de Euros. Piénsese que la FORTA y Canal + pagan a la Liga Española de Fútbol 106 millones de Euros por nueve años de derechos de emisión.

Tan astronómicas cifras son recuperadas por las cadenas de televisión.
La cadena que retransmite este acontecimiento en los Estados Unidos cobra más de 2 millones de Euros por 30 segundos de publicidad. Y todas las compañías se esfuerzan en concebir las campañas publicitarias más ingeniosas y costosas para estrenarlas en algún momento de las más de tres horas del último domingo de enero que se juega la Superbowl.

No podía ser de otra forma si tenemos en cuenta que la audiencia de la Superbowl XXXVI, celebrada en el año 2003, alcanzó los 131.7 millones de espectadores en Estados Unidos, suponiendo un hito personal para la cadena FOX.
Aunque el récord absoluto lo detenta la final celebrada en enero de 1999 con unos ratings del 53.5 (unos ciento cuarenta millones de espectadores).

El fenómeno de la Superbowl es algo especial, como demuestra que nueve de los diez programas de televisión más vistos en toda su historia en los Estados Unidos son Superbowls. Por no contar que el encuentro se inicia después de un mensaje del Presidente a la nación y que todas las bases norteamericanas y los barcos de la Armada (Navy) reciben la señal en directo.

El video resumen de la Superbowl, editado por NFL Films, alcanza las 525.000 unidades vendidas, siendo la mejor cifra de la historia para un video deportivo. Los de la NBA no acostumbran a pasar las 50.000 o 60.000 copias. Esta película se empieza  a rodar desde que se inicia el campeonato y tiene una duración final de 44 minutos pero la suma de todo lo rodado alcanza una duración de 47 días con sus 47 noches.

Con estas cifras tan asombrosas no sorprende que todas las innovaciones técnicas de la televisión hayan nacido de la Superbowl; por ejemplo la ‘repetición de la jugada’ o más recientemente la implantación del efecto Matrix o rodaja de tiempo, en el que vemos una imagen congelada en el tiempo alrededor de la cual gira la cámara (todavía no la hemos visto en las retransmisiones deportivas españolas). Durante el partido hay mas de 60 camiones con satélites de televisión para la retransmisión del mismo.