Inicio > Radio > 8 Una emisora en la escuela > 8.3 Las radios escolares en el panorama radiodifusor...

8.3 Las radios escolares en el panorama radiodifusor español

Tal y como se explica en el capítulo Historia y evolución, la llegada de la democracia a mediados de la década de los 70 y la particular distribución territorial y administrativa del Estado que con ella se fraguó, condujo a una reorganización del panorama comunicativo que desembocó en el nacimiento (o la reaparición) de medios audiovisuales autonómicos y locales. En realidad, los medios autonómicos se crearon para ser los transmisores de las particularidades de las diferentes comunidades pluriculturales que conforman España, lo que nos lleva a pensar que los principios que entroncaron lo local son los mismos que encauzaron los de carácter autonómico en cuanto a políticas comunicativas se refiere: promoción cultural, defensa de la lengua propia y dinamización socio-económica de una determinada comunidad.

Junto con las estaciones municipales, en el terreno de lo local surgieron emisoras independientes de distinto calibre, impulsadas por colectivos tan diversos como asociaciones de vecinos, grupos de amigos de la radio, entidades culturales y, también, centros escolares. En algunos casos, sobre todo en pequeñas poblaciones con escaso número de habitantes, estas últimas llegaron a convertirse, incluso, en estaciones radiofónicas que servían a toda la localidad.

A mediados de la década de los 80, en la mayoría de las comunidades españolas existía alguna experiencia de radio escolar, aunque la diversidad en cuanto a uso del medio y estructura programática era la tónica dominante. De hecho, no todos los centros disponían de los mismos recursos, ni tampoco en todos ellos los profesores implicados en los proyectos poseían los mismos conocimientos sobre el medio. Por otra parte, la estructura del sistema educativo y los diseños curriculares de entonces entorpecían la introducción de la radio en la escuela y su desarrollo, puesto que un buen número de educadores no veían con buenos ojos las iniciativas de introducir el medio en sus centros.

Pese a estas dificultades, colegios como el C.P. Ramón y Cajal, en Pina de Ebro (Zaragoza), el C.P. La Peineta, en Puerto Sagunto (Valencia), el C.P. La Gloria, en Vélez (Málaga), el C.P. Santo Cristo de la Veracruz, en Consuegra (Toledo), el C.P. Del Paso, en El Paso. La Palma (Tenerife), el C.P. Serafico, en Elda (Alicante), el C.P. Font Freda, en Montcada i Reixac (Barcelona), e Institutos de Bachillerato como el Juan Antonio Castro, en Talavera de la Reina (Toledo), el de "A Xunqueira", en Pontevedra, o el de Astrabudua, en Erandio (Vizcaya), disponían, entre otros, de radio escolar, tal y como recoge María Gutiérrez, profesora de radio en la Universidad Autónoma de Barcelona, en su tesis doctoral Los programas infantiles en la radio y la televisión.

A comienzos de la década de los 90, coincidiendo con una clara expansión de radios locales en todo el territorio español, las emisoras escolares también se extienden, hasta el punto de que en mayo de 1991 se celebra en la localidad gaditana de Olvera un Encuentro de Radios Escolares. Allí se constata que sólo en la comunidad autónoma de Andalucía funcionan cerca de 60 redes, al tiempo que se detecta una importante implantación del fenómeno en otras zonas como Cataluña, Galicia, Asturias y el País Vasco. En la actualidad, todavía perviven algunas de aquellas emisoras, aunque un buen número han desaparecido o se han transformado en estaciones dependientes de los Ayuntamientos. Paralelamente, a lo largo de los últimos años han surgido nuevos operadores escolares, como es el caso de la catalana Ràdio Ràpia, emisora de la que hablaremos un poco más adelante.

Junto con estas emisoras, tenemos constancia de la existencia de otras experiencias radiofónicas escolares, surgidas gracias a los espacios que algunas redes convencionales cedían gratuitamente a los centros (Radio Popular de Granada, donde se emitía el programa Semilla Juvenil; Radio Cadena Española en Las Palmas de Gran Canaria, con el espacio Brújula; Ràdio Reus (Ser), con L´escola a la ràdio; o Radiocadena Española en Monforte de Lemos (Lugo), desde donde se podía sintonizar el espacio Espinilla Rebelde. Por otra parte, el panorama se completaba con emisiones como las de la histórica Radio Ecca, una estación que todavía hoy pervive y que comenzó su andadura escolar el 15 de febrero de 1965 en la isla de Gran Canaria, día en que se transmite la primera clase a distancia para personas adultas.

Uno de los denominadores comunes de las radios escolares que en su día funcionaron en nuestro país, y el de aquellas otras que aún lo siguen haciendo, es su reducida franja de emisión y el hecho de que ésta se lleve a cabo fuera del horario escolar (es decir, como actividad extraescolar), aunque buena parte de los productos que conforman la programación se elaboran en horas de clase. La profesora María Gutiérrez advierte que la radio como actividad extraescolar es una de las fórmulas más usuales de utilizar el medio radiofónico en los centros, aunque también se explotan otras posibilidades, como el taller de radio o implicando al medio en el contenido de los programas escolares, con emisión de contenidos estrechamente ligados a diferentes asignaturas (soporte didáctico).