Primero cavaban
una profunda fosa y detrás de ella una empalizada
de estacas. La morfología del campamento era
sencilla y funcional. Tenía forma rectangular y
siempre la misma distribución. Las tiendas se
levantaban siguiendo una estructura reticular.
Había cuatro puertas que daban acceso a las dos
calles más anchas, la via principalis, que
cruzaba el campamento de norte a sur y la vía
decumana, que recorría el campamento de este a
oeste. Ambas vías convergían en un espacio central
en el que se levantaba el cuartel general, las
oficinas, un templo y una zona para arengas, y
actos rituales.
Los campamentos se podían
levantar para pernoctar, para pasar el invierno o
incluso como asentamientos estables que dieron
lugar a ciudades, por ejemplo León, nació como
campamento de la Legio Gemina VII, para defender
el norte del valle del Duero de los saqueos de los
astures.