La Teoría de la Tectónica de Placas,
también llamada de las Placas Litosféricas o Tectónicas
y actualmente conocida como Tectónica Global, surge a
finales de la década de los 60 (T. Wilson), como
consecuencia de una serie de datos geofísicos y de
teorías anteriores iniciadas en 1912 con la Deriva
Continental (A. Wegener) y culminadas a principios de los
60 con la Expansión de los Fondos Oceánicos (H.H.Hess).
2.1. Deriva Continental
Alfred Wegener propuso, en 1912,
la hipótesis de que los continentes actuales proceden
de la fragmentación de un supercontinente más antiguo,
al que denominó Pangea. Su teoría se basa en una serie
de pruebas o argumentos:
Pruebas morfológicas
Coincidencia entre las costas de continentes hoy en día separados
Ejemplo: África y Sudamérica
Pruebas biológicas / paleontológicas
Continentes separados tienen floras y faunas diferentes, pero fósiles idénticos
Ejemplo: marsupiales en Australia
Pruebas geológicas
Estructuras geológicas iguales en continentes separados
Ejemplo: diamantes en Brasil y Sudáfrica
Pruebas climáticas
Rocas indicadoras de climas iguales en zonas a distinta latitud en la actualidad
Ejemplo: depósitos glaciares de la misma época en la Patagonia y la India
Pruebas geomagnéticas
Minerales magnéticos en rocas de igual edad en distinto continente indican dos polos norte.
Trasladando los continentes, apuntan a un único polo
La teoría de Wegener fue desechada
por la mayoría de los científicos de la época, al no
poder aportar los datos necesarios para explicar el
mecanismo por el que los continentes se mueven. En
los años '60, con los conocimientos geofísicos
desarrollados durante el siglo XX, se consigue explicar
dicho mecanismo y, por tanto, el reconocimiento
científico de Alfred Wegener.
2.2. Las corrientes de convección del
Manto
A finales de la década de los 40, se
sugiere la posibilidad de que exista en el Manto
la plasticidad suficiente como para propagar
el calor interno de la Tierra mediante corrientes de convección.
La base de esta hipótesis es la distribución del gradiente
geotérmico, máximo en las grandes dorsales oceánicas y mínimo
en las fosas marinas, siendo esta la distribución característica
del calor en un sistema convectivo.
Actualmente se cree que las corrientes
afectan a la totalidad del Manto y que la
Litosfera (especialmente la que posee
corteza oceánica) forma parte de las células convectivas, llegando la subducción hasta el
nivel D" del Manto (en contacto con el
Núcleo). En la imagen posterior puedes
observar un modelo 3D en el que las
corrientes ascendentes aparecen en el
gráfico de la izquierda (en amarillo) y
las descendentes en el de la derecha (en
azul). En la superficie aparecen
perfilados los límites de placa (en
blanco).
2.3. La expansión del fondo oceánico
Diez años después (finales de los '50 -
principios de los '60), Harry Hammond Hess sugiere que los
fondos de los océanos se expanden continuamente mediante
material del interior que sale por las dorsales oceánicas,
lo que no sólo agrandaría las cuencas oceánicas, sino que
empujaría a los continentes a separarse entre sí.
Esta afirmación se basa en la distribución de edades de la corteza oceánica:
* Actual en el entorno de las dorsales
* Aumenta de manera progresiva y simétrica, a ambos lados de la dorsal, según nos alejamos de ella
* La edad máxima, por donde volverían los materiales al interior, se encuentra a los lados de las grandes fosas marinas
Del mismo modo, los sedimentos marinos aumentan
de espesor según nos alejamos de la dorsal. Si
aceptamos que a más tiempo expuesto a la sedimentación
le corresponde mayor cantidad de sedimentos, esto
corrobora la distribución de edades.
Sabemos, también, que los polos magnéticos
se invierten espontáneamente. Observando las
inversiones registradas en rocas marinas,
encontramos las pruebas de dichas inversiones
situadas simétricamente a ambos lados de las dorsales.
2.4. Los cinturones activos
Se consideran zonas de actividad desde
al punto de vista geológico aquellas zonas donde el vulcanismo
y la sismicidad (los terremotos) son activos, dado que éstas
son las manifestaciones de la actividad interna de la Tierra
más fácilmente observables.
Curiosamente, estas zonas no se distribuyen en regiones
extensas, sino que forman 2 grandes alineaciones de miles
de kilómetros de longitud y sólo unos pocos de ancho, los
cinturones activos, que dada su situación en la Tierra, se
denominan:
* Cinturón Circumpacífico
(antiguamente conocido como "Cinturón de Fuego del Pacífico"), que bordea las costas americanas, asiáticas y oceánicas del océano Pacífico.
* Cinturón Eurasiático-Melanésico, que incluye las cordilleras alpinas de Europa y Asia, conectando con el anterior en el archipiélago de Melanesia.
2.5. Conclusión: Tectónica de Placas
Con todos estos antecedentes, a la nueva teoría sólo había que "darle forma". En realidad es una conclusión lógica de la "Expansión del Fondo Oceánico". Su planteamiento se debe a varios científicos, entre los que se encuentran H.H. Hess y el canadiense Tuzo Wilson, a finales de la década de los '60 (1968-1970).
Básicamente la teoría propone lo siguiente:
* El transporte de calor a través del
Manto se realiza por convección
* La Litosfera está dividida en
placas que se corresponden con la corriente superficial de cada célula convectiva del
Manto.
* Donde dos células convectivas contiguas son ascendentes, se forma una dorsal y se crea corteza oceánica.
* Donde dos células convectivas contiguas son descendentes, se forma una
fosa oceánica y se destruye corteza.
* La Corteza continental es tan
poco densa que no llega puede introducirse
en el Manto.
* Los límites entre las placas son las zonas más inestables de la Corteza, dando lugar a los cinturones activos