En
la naturaleza ocurren muchos sucesos. Esos
sucesos pueden pasar desapercibidos o
llamar nuestra atención. Si nos llaman
la atención, entonces nuestros sentidos
se ponen alerta y observamos.
La observación no tiene
por qué realizarse únicamente con los
ojos. También podemos utilizar otros
sentidos.
Siguiendo los pasos de un
científico, se observa el hecho completo
y se describe de una forma objetiva y minuciosa. A
continuación, planteamos el problema.
Para que un problema sea
tratado de forma científica, debe
presentar dos características: ser
relevante y ser resoluble.
Relevante quiere decir
que tiene importancia comprender por qué
ocurre el suceso.
Resoluble quiere decir
que se puede encontrar respuesta al
problema.
Observa la bola. Produce un extraño
movimiento. La estas observando.
Describe su recorrido en un papel.
¿Podrías resolver cómo se mueve sola?
¿Sería relevante hacerlo?
Actividad de investigación
Seguro que sabes que chocando dos piedras se
puede hacer saltar una chispa para producir
un fuego. ¿Conoces el aspecto de esas
piedras?
Busca la solución a estas
preguntas en las direcciones de Internet que
te recomendamos:
También puedes hallar la respuesta en otras
direcciones que tú encuentres o en libros de
la biblioteca.
Fíjate bien en
las imágenes de las rocas. Realiza un breve
documento en el que describirás con detalle,
utilizando tus propias palabras, el aspecto
que presentan esas rocas.
El profesor presenta 5
minerales. Los alumnos deben observarlos y
anotar:
Características del
mineral.
Sentido utilizado para
reconocer cada característica (vista,
oído, olfato, gusto, tacto).
Si fuese necesario,
objeto utilizado para conocer la
característica.
Importante: ¡No es
necesario conocer el nombre del
mineral!
Cada alumno debe construir
una tabla en la que se recogerá el mayor
número de características para cada uno de
los 5 minerales. El aspecto de la tabla
podría ser el siguiente:
